ROI significa return on investment o retorno de la inversión, y se refiere a los rendimientos obtenidos de alguna inversión durante un plazo establecido y expresados de manera porcentual.
Permite determinar el éxito de cada movimiento en la inversión realizada por una empresa, ayuda a predecir la viabilidad de nuevos negocios, la toma de decisiones, y a mantener un equilibrio entre lo que se gana y lo que se invierte.
En términos de marketing, el ROI se refiere al valor económico generado a partir de alguna campaña, buscando obtener la mayor eficiencia posible, entre lo invertido y el beneficio que será obtenido.
La fórmula para calcular el ROI es muy sencilla:
[(ingresos – inversión) / inversión] * 100 = retorno de inversión
Si invertiste $10,000
y obtuviste ingresos por $25,000
[(25,000 – 10,000) /10,000] * 100 = 150
Obtuviste 150% de ganancias. Esto es tu ROI.
Un ROI alto será muy positivo, y mientras más cercano al cero sea el resultado, menos atractiva es la inversión. Si el resultado es negativo, significa que se está perdiendo dinero.
Sin embargo, determinar el ROI dentro de algunos sectores como el marketing puede ser complejo, ya que existen muchos elementos variables tanto en la inversión como en las ganancias.
Dentro de la inversión no solo debemos considerar el monto destinado a llevar a cabo una campaña. En esta cifra, es necesario incluir todos los gastos implicados en el desarrollo de la misma, por ejemplo:
- Los costos creativos: Hay que tomar en cuenta el tiempo que los diseñadores y mercadólogos invirtieron para desarrollar la campaña.
- Los costos técnicos: Suministros, servicios, alquiler, etcétera.
Todos estos gastos derivados de la elaboración de una campaña se deben considerar como parte de la inversión, así como lo que se pague por la promoción o exhibición de la campaña en sí, por ejemplo, los gastos en Adwords, anuncios en redes sociales o cuentas premium en plataformas de automatización.
Tener bien definido en qué estamos gastando nos permitirá ahorrar costos, ya que podremos identificar gastos innecesarios.
Del mismo modo, para calcular el ROI debemos considerar los beneficios netos, es decir, a los beneficios brutos que obtengamos debemos restar los gastos operacionales o de producción, los que podrían variar dependiendo del giro de la empresa.
Existen calculadoras en línea que ayudan a calcular el ROI con la fórmula básica y otras para determinar de manera más precisa el retorno de inversión de las campañas de marketing.
Conocer todos los elementos que influyen para determinar la inversión nos permite hacer ajustes como ahorrar costos, mantener un equilibrio entre la inversión y las ganancias, implementar mejoras en futuras campañas, identificar qué tipo de acciones generan mejores resultados y justificar los gastos.
También sirve para comparar dos posibles inversiones y determinar cuál conviene más.
En tiempos difíciles, muchas empresas suelen hacer recortes de presupuesto y el área de marketing puede verse involucrada, lo cual es un error. Teniendo un cálculo del ROI sólido y bien definido, se podrán demostrar los beneficios de las inversiones en marketing para una compañía.