El control de las finanzas es un rubro de extrema importancia para todo tipo de emprendimiento y empresas. Mediante su correcta gestión es posible optimizar la liquidez, mantener la continuidad de las operaciones, proyectar un crecimiento sostenido y lograr la consolidación de un negocio rentable.
En dicha gestión, el ahorro juega un papel de suma importancia. Entre menos gastos registre el negocio, mayores serán las utilidades. Por eso resulta fundamental aplicar los siguientes consejos para ahorrar al interior de la empresa.
Esta es una de las características de todo negocio rentable y próspero. Una gestión deficiente de inventario se traduce en capital inmovilizado, costos de almacenamiento innecesarios y pérdidas de mercadería por merma, robo o daños.
Al optimizar los procesos administrativos y operativos de la organización, se eliminan los desperdicios y se reducen los tiempos de ejecución de tareas.
En consecuencia, se sacan de la ecuación los gastos asociados a tiempos muertos, materias primas mal utilizadas, reparación de maquinaria por manipulación inadecuada, etc.
Para optimizar los flujos de trabajo, más allá de una supervisión extensiva, también existe la posibilidad de implementar un software de gestión de procesos que le permita a la empresa reducir el coste de cada tarea mientras optimiza su rendimiento.
Las redes sociales sirven para fidelizar a los clientes y ejecutar campañas de Social Media Marketing.
Pero también es posible emplearlas para suplir actividades o servicios que conllevan un coste para la empresa. Por ejemplo:
Es uno de los consejos para ahorrar más difíciles de aplicar, especialmente para las pequeñas y medianas empresas dado su poco poder de negociación ante las entidades financieras.
No obstante, es importante que la empresa busque la mejor opción entre varias soluciones de financiación, preferiblemente con la asesoría de un experto.
Con la ayuda de un contador especializado en tributación, la empresa puede planificar sus obligaciones fiscales y desarrollar estrategias que le permitan acceder a beneficios y reducir la carga sin incurrir en elusión o evasión, así como crear su presupuesto empresarial.
Los gastos generales pueden representar pérdidas importantes. Es necesario buscar estrategias para evitarlos.
Por ejemplo, en lo que respecta a la factura de teléfono, es factible contratar un servicio de telefonía IP que sale mucho más económico y resulta más efectivo.
La factura eléctrica puede reducirse empleando iluminación natural y manteniendo apagados los equipos cuando no están en uso.
Cada empresa puede diseñar sus propias estrategias para ahorrar en función de sus necesidades y condiciones particulares. Pero, en todo caso, resulta fundamental incentivar una cultura de ahorro en los empleados.
Cuando los trabajadores laboran desde sus casas las empresas se ahorran los gastos asociados a sus espacios para trabajar y los servicios públicos que este consume durante la jornada.
Por supuesto, el ahorro es pilar fundamental para alcanzar los objetivos estratégicos de la empresa.
Por eso es necesario que cada acción esté relacionada con ellos y que la gerencia trace planes a corto, mediano y largo plazo que justifiquen los recortes y permitan consolidar un negocio rentable capaz de alcanzar sus metas.