Todos alguna vez hemos tenido flojera de realizar ese reporte, entrar a esa junta o simplemente hacer una tarea que venimos postergando. A esto se le conoce como procrastinación y es un mal cada vez más frecuente en el mundo.
Aunque parezca algo inocente, el dejar las cosas para otro día puede volverse un auténtico enemigo del progreso y la mejora constante. Incluso existen casos de que la procrastinación ha terminado por hundir a negocios pues esto lleva a la desidia. Para que no te pase, aquí te contamos más sobre este mal hábito y algunos consejos para dejar de procrastinar en el trabajo.
La procrastinación es el acto de postergar tareas, actividades, situaciones o cosas que debes hacer o atender. Esto, ya sea porque no quieres hacerlo, porque te da miedo, pereza, apatía, o no te resulta agradable ni relevante.
Si alguna vez has tenido que realizar algún reporte y en su lugar, te fuiste por un café o revisaste tu Facebook, ese es un ejemplo perfecto de procrastinar en el trabajo.
Si tú también quieres dejar la procrastinación laboral y aumentar la productividad, es mejor que leas estos consejos:
Muchas veces caemos en la procrastinación en nuestro trabajo porque no sabemos para qué lo hacemos o carecemos del sentido de pertenencia adecuado. Y es que cuando haces algo de forma repetitiva y automática, corres el riesgo de restarle importancia y a la más mínima distracción puedes terminar dejándolo para luego.
Por ello es que una forma de evitar procrastinar en el trabajo es conocer y empaparse de los objetivos de la empresa. De esta forma, podrás conocer mejor qué es lo que hace y para qué lo hace, te sentirás motivado y lograrás aumentar tu productividad significativamente.
Si eres directivo, una estrategia que puedes seguir es aprovechar el marketing y comunicación interna para difundir en reuniones la filosofía de la empresa. De esta forma, todos los trabajadores conocerán los objetivos, aumentará su compromiso y se reducirá la tasa de procrastinación laboral.
Otro de los mejores consejos que podemos darte para reducir la procrastinación es que establezcas prioridades. Esto con el objetivo de enfocarte en las tareas o pendientes que realmente urgen y dejar el resto para después.
Al categorizar las tareas por la urgencia o la relevancia de las mismas evitarás caer en la procrastinación pues atenderás lo que vale la pena. Lo menos relevante, que a veces solo hace bulto, podrás dejarlo para luego, cuando estés más tranquilo.
Una forma en la que puedes lograr esto es comprando una agenda o un pizarrón y poner en rojo todas las tareas urgentes, en amarillo las que requieren rapidez pero no son tan importantes y en verde, las que puedes postergar, es decir, las que son de baja prioridad.
Además de categorizar las tareas que tienes que realizar, otra buena forma de aumentar la productividad es definir fechas de entrega. Y es que, cuando tienes la presión de un deadline o plazo de entrega te verás presionado para darte prisa.
Si bien, muchos mexicanos caen en el vicio de dejar todo para el último minuto, los plazos de entrega pueden ayudarte a que, aún así, te mueva la urgencia. Incluso también puedes combatir la procrastinación laboral creando fechas de entrega fraccionadas.
Por ejemplo, puedes establecer 3 fechas de entrega parciales para mostrar avances. De esta forma te motivas a trabajar progresivamente y no dejarlo todo hasta el último momento. Así también evitas que la calidad de un proyecto pueda verse afectada por la urgencia de entregarlo.
Uno de los errores más comunes para los empleados, emprendedores y autónomos es el no gestionar su tiempo de forma adecuada. Según expertos, esto puede ser una causa de procrastinación en el trabajo.
Existen muchas técnicas que puedes usar para mejorar tu gestión del tiempo y aumentar la productividad. El uso de herramientas como Asana o Monday, así como agendas tanto digitales como impresas pueden resultar muy útiles.
También existen otras técnicas de productividad donde destinas poco tiempo a tareas breves, por ejemplo, solo 5 minutos y así en distintos intervalos. Otra opción es sacar lo más pequeño y rápido primero para evitar una acumulación de tareas que te desmotive.
Por supuesto que la mejor forma de evitar la procrastinación laboral y aumentar la productividad está en evitar distracciones. Esto debido a que muchas veces, caemos en la procrastinación por distraernos con cosas que parecieran simples o inocentes.
Una buena estrategia para evitar procrastinar en el trabajo es reducir tu acceso a redes sociales, a plataformas de videos, videojuegos, etc. De esta forma, no habrá distracciones que puedan quitarte el tiempo solo por ocio.
Si tienes un asistente o gestionas una agenda, puedes programar las horas de trabajo más críticas de modo que no haya distracciones de otras personas, reuniones, etc. Aquí es donde la gestión del tiempo y de tu lista de pendientes juegan un papel clave.
Recuerda que los espacios de trabajo juegan un papel muy importante en la productividad y por ende, pueden evitar la tan temida procrastinación laboral. Esto porque, tanto una obra que hace ruido como una falla del internet o electricidad pueden afectar tu trabajo.
En IZA, encontrarás los mejores espacios de trabajo perfectos para aumentar tu productividad y evitar la procrastinación. Aquí no tendrás que preocuparte por nada pues los espacios están completos y listos para que abras tu laptop y comiences a trabajar.
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