La fortaleza de una empresa son sus valores. En un ambiente laboral donde se prioriza el respeto a la ética empresarial prevalece una dinámica de trabajo más eficiente.
Los valores compartidos son fundamentales al momento de adoptar una buena cultura de ética. Para ello, los principios éticos de la organización y los de los colaboradores deben estar alineados en la misma dirección.
En este artículo te contamos los beneficios de la ética empresarial y de qué manera puedes consolidarla.
¿Por qué debería importarte la ética empresarial y cómo afecta tu rendimiento?
La ética empresarial es el conjunto de valores y normas que surgen de la cultura de la empresa. A partir de estos, se rige el comportamiento de quienes trabajan en la organización.
Una ética empresarial sólida no solo ayuda a mejorar el clima laboral al promover la igualdad y el respeto a los derechos. También permite aportar valor a la sociedad, mediante los principios morales que proyecta a los consumidores.
Valores como la responsabilidad y una conducta congruente con la cultura organizacional son factores determinantes a la hora de que los clientes tomen una decisión de compra.
Por medio de estas prácticas la empresa demuestra a los consumidores que estos pueden confiar en ella. De esta manera, logrará conectar con las personas de una manera más profunda y así ofrecer una mejor experiencia a su audiencia.
Por su parte, el talento humano suele sentir una gran admiración por una empresa con ideales de respeto, lealtad, responsabilidad e integridad similares a los suyos.
Al identificarse con estos valores, los trabajadores se sienten como en casa, más motivados e integrados a su lugar de trabajo. Esto contribuye a un mejor ambiente laboral y una mayor productividad.
Por lo tanto, una empresa que aspira a ser más competitiva no puede centrarse únicamente en obtener beneficios. Para que el éxito sea completo, necesita desarrollar una serie de principios éticos con los que la audiencia y el equipo de trabajo puedan sentirse identificados.
¿Cómo la ética empresarial puede mejorar tu productividad y la de tu equipo?
La conducta y los valores de una empresa son factores fundamentales para que se desarrolle un ambiente ético en la misma. En este sentido, son los directores quienes a través de su comportamiento y principios éticos transmiten a los empleados la cultura ética empresarial.
Por medio de estas estrategias, el personal percibe que la compañía vela por la mejora de sus intereses, motivándolo a adoptar también actitudes éticamente correctas.
Esto no solo retiene y atrae al talento humano. También incrementa la satisfacción de la plantilla y, por lo tanto, su compromiso y eficiencia en el trabajo.
Beneficios de una ética empresarial consolidada
Las ventajas de las que puede disfrutar una compañía que define y aplica una buena ética empresarial son:
- Mantiene a la empresa dentro de los límites de la ley, evitando casos de vulneración de derechos. Esto garantiza que no se cometan delitos contra sus empleados, proveedores, clientes u otras partes.
- Mejora la imagen y la reputación de la compañía y genera confianza hacia los consumidores, que la elegirán sobre sus competidores. Esto se traduce en un mayor valor de marca.
- Aumenta el atractivo de la empresa para los inversionistas. Seguir prácticas éticas encamina al negocio hacia el éxito, siendo más probable que inversores inviertan dinero en él.
- Incrementa la satisfacción de la plantilla. Una ética empresarial sólida fomenta el bienestar de los trabajadores. Los empleados satisfechos son más productivos y creativos, ya que no tienen preocupaciones que le impidan la máxima atención y dedicación en sus trabajo.
Impacto de los espacios de oficina en la construcción de la ética empresarial
La ética empresarial no solo se vincula con la creación de normas y valores. Es un factor estrechamente relacionado con el bienestar y la satisfacción de los empleados.
Cuando se trata de conseguir un mayor bienestar en la empresa, los espacios físicos de trabajo representan un lugar clave para promoverlo. Por lo tanto, garantizar entornos de trabajo saludables debe convertirse en una prioridad para cualquier organización.
Ofrecer espacios de trabajo cómodos y bien equipados hará que los empleados se sientan valorados y a gusto en su lugar de trabajo. Esto permite desarrollar lazos de confianza y un sentido de pertenencia, aumentando la productividad y mejorando los resultados del conjunto corporativo.
La ética empresarial está conformada por el grupo de valores y normas que surgen de la cultura organizacional. Las empresas que se mantienen éticas y tienen un adecuado balance entre sus principios y las acciones para garantizar su cumplimiento gozan de mejor ambiente laboral.
Esto permite atraer y retener al mejor talento, aumentar el compromiso y mejorar la productividad, contribuyendo a un mayor éxito y crecimiento en el mercado.
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